EL DUENDE DE LA ILUSIÓN Y EL HADA CELESTE
Érase una vez un duende
llamado el Duende de la
Ilusión a quien le encantaba divertirse. Así que era capaz de
bailar todo el día, simplemente sabiendo reconocer la música de su corazón. El
Duende de la Ilusión
se sentía inmensamente feliz siendo capaz de bailar al son del divertido latido
de su corazón. Sin embargo, también deseaba compartir tan bellos momentos con
alguien con la sensibilidad necesaria para marcar los pasos de tan rítmico
baile…
Por la noche el Duende de la Ilusión husmeaba en los
sueños de los humanos, esas criaturas tan ensimismadas en los quehaceres de sus
vidas cotidianas, que se olvidaban de disfrutar. Pero los humanos poseían un
don: a través de sus sueños nocturnos podían dar rienda suelta a su
inconsciente lo que daba origen al más variado contraste de imágenes oníricas.
Algunas de ellas eran tan originales y creativas que incluso tenían la virtud
de hacer sentir bien al Duende de la Ilusión.
A veces el Duende de la Ilusión bajaba a visitar los sueños de los humanos
con su más fiel aliada: el Hada Celeste, la cual era capaz además de contemplar
esas imágenes, de interpretar las emociones que aparecían ligados a esos
sueños. Al Duende de la
Ilusión le encantaba
descifrar el significado y los sentimientos que acompañaban a la estructura de
los sueños de la especie humana. Lo encontraba un misterio fascinante de
resolver.
Además al Duende de la Ilusión le chiflaban los sueños felices y solía
bailar en ellos junto al Hada Celeste, pero, una noche ambos se perdieron en
las lágrimas que nacían de la angustia y la tristeza de una pesadilla de una
chiquilla. El Duende de la
Ilusión y el Hada
Celeste trataron de escapar del sueño, corrían en todas direcciones pero les
resultó imposible salir:
-Tranquila, hada –le dijo el
Duende de la Ilusión-,
escaparemos cuando la chica despierte.
Sin embargo, cuando la
chiquilla despertó, el Duende de la
Ilusión y el hada
siguieron atrapados en ese mal sueño porque la chica era incapaz de apartar de
su mente la pesadilla que había soñado la noche anterior. Así que el Duende de la Ilusión y el hada vagaron por los pensamientos
negativos de la chica, prisioneros de esa cárcel intangible. Eran esclavos de
sus emociones más ocultas que ahora bañaban cada momento que ella vivía. Desde
esa posición, ambos sintieron en lo más profundo de su alma, el frío de las
lágrimas de la chiquilla, el bloqueo y el sufrimiento que regaba su corazón de
un dolor tal, que el hada y el Duende de la Ilusión
nunca habían sabido reconocer en nadie. Dispersos en la mente de la
chiquilla, decidieron idear un plan para añadir una ráfaga de alegría a ese
martilleo incesante de negatividad que se había convertido en un peligro para
el equilibrio emocional de la chiquilla y a la vez ponía a prueba su fortaleza
interior. Sin embargo, era evidente que su fuerza emocional se tambaleaba por
momentos.
El Duende de la Ilusión soplaba con fuerza destellos de ilusión y
amor en dirección al corazón de la chica y el Hada Celeste, a lomos de su fiel
unicornio mágico, envió al subconsciente de la joven una lluvia de estrellas de
tal magnitud que la joven miró al cielo y vio que las estrellas que de ahí
colgaban habían nacido de un lugar tan profundo y cautivador que con tan solo
mirarlas, su corazón se enternecía y dejaba de llorar. Ese lugar donde nacieron
las estrellas se reflejaba en el espejo de los ojos de la joven y ella pudo
reconocer su poder gracias a la brisa de serenidad que se desprendía de los
pasos apresurados del Hada Celeste y del Duende de la Ilusión , que regresaban a
su mundo encantado…
Autora: María Jesús
Verdú Sacases
Estas ilustraciones
han sido realizadas según el método de Christopher Hart en Dibujar Hadas (págs.
47 y 69).
ho ho ho que bonito
ResponderEliminarbesos
Muchas gracias Txatxa por tu comentario
EliminarUn abrazo
Mágico, un poco melancólico y con final feliz, me ha encantado.
ResponderEliminarFelicidades, un saludo!
Gracias Artesanía Guadalajara, estamos encantadas de recibir tu visita
ResponderEliminarUn abrazo
Una aportación de un cuento lleno de ternura y buenos deseos con final feliz !!!! Gracias Maria Jesus un abrazo muy fuerte de Begoña
ResponderEliminarLa ilusión nunca se debe perder, ella siembra alegría en nuestros corazones.
Eliminar¿Quién es la que pinta con los dedos? ¿Pilar o Begoña?
Besossss
Sin ilusión nada es posible, Norma. La que pinta con los dedos es Pilar. A tu servicio, jajaja
ResponderEliminarUn abrazo
Lo que más me gusta el el final!!! siempre es bueno acabar bien. Un besazo y muchas gracias.
ResponderEliminarGracias a tí, Blanca por tu visita. A mí también me gustan los finales felices..¡y a quien no!
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, queridas Pilar y Begoña, por permitirme formar parte de vuestro creativo proyecto, publicando este cuento e ilustraciones de mi autoría. Es algo que me ha hecho feliz crear pero todavía me satisface más compartirlo con los demás.
ResponderEliminarContribuir, como habéis hecho vosotras, a su difusión con este maravilloso espacio virtual Tejiendo cuentos y poesías infantiles es algo que me hace sentir tremendamente bien y que os ennoblece pues habéis tenido una idea genial con este lugar particitativo y lleno de belleza e ideas.
Adoro los cuentos y las poesías. De hecho, las hadas y los duendes son personajes de literatura infantil que han estado conmigo desde niña y aún ahora siguen siendo los protagonistas de mis cuentos.
Ha sido un placer colaborar con vuestro proyecto.
Gracias a las dos y que a este blog no le falten nunca ni cuentos ni poesías.
Muchas gracias a tí, Mª Jesús por tu participación.Sabes que tienes la puerta abierta siempre que quieras. Ha sido un placer trabajar contigo.
ResponderEliminarUn beso enorme
ResponderEliminarFelicitaciones Mª Jesús !!!!!esperamos contar con tu colaboración en Tejiendo cuentos, será un placer tenerte entre nuestras colaboradoras, un abrazo muy fuerte de Begoña
Muy buenas!!!!! Soy Gemi, del BLOG ENCANTADO. Quería agradeceros vuestro comentario en el blog, y deciros que ya os conocía, me enredo en vuestros cuentos y poemas muy amenudo, es un blog fantástico del que podemos aprender múchísimo. Un fuerte abrazo y aquí me teneis para lo que necesiteis.
ResponderEliminarQue cosa mas bonita de cuento por favorr, me ha encantado. Q verdad q muchas veces por pensamientos negativos dejamos ir la ilusion y eso nunca debe de ocurrir conque muchisimas gracias por el relato q me ha encantado!!
ResponderEliminarUn besote enorme
Que lindo cuento. Me ha encantado los personajes de el Duende de la Ilusion y el Hada Celeste. Que linda e importante labor hacen, visitar los sue˜õs de los humanos.
ResponderEliminarun abraXo!